68 Voces, 68 Corazones: «Nadie puede amar lo que no conoce»

68 Voces

Una entrevista con Gabriela Badillo, fundadora de 68 Voces

De México, una serie de historias animadas indígenas narradas en sus idiomas nativos. Fueron creadas bajo la premisa de «nadie puede amar lo que no conoce», con el fin de promover el orgullo, el respeto y el uso de lenguas nativas. También ayuda a reducir la discriminación y a promover el orgullo hacia todas las comunidades y culturas que componen la riqueza cultural de México. «68 Voices» es un proyecto creado por Gabriela Badillo/HOLA COMBO.

PARA MÁS INFORMACIÓN: https://68voces.mx/projects

VER MÁS VIDEOS: https://www.youtube.com/channel/UCivRXbPMMuE1XJYIFl61wRw/videos

¿Qué es 68 Voces?

“68 Voces 68 Corazones (“68 voces”) es una serie de cuentos indígenas animados narrados en su lengua originaria, creados en las 68 lenguas indígenas de México. Bajo la premisa “Nadie puede amar lo que no conoce”, con el fin de ayudar a fomentar el orgullo, respeto y uso de las lenguas indígenas mexicanas entre hablantes y no hablantes. Así como para ayudar a disminuir la discriminación y fomentar un sentido de orgullo hacia todas las comunidades y culturas que forman parte de la riqueza cultural de México. Para amar la diversidad.

En el punto en el que estamos, estamos a la mitad de su producción, llevamos 35 historias, 35 corazones visibilizados, nos faltan 33. Estamos buscando recursos para continuar la producción, y enfocándonos también en los 35 que ya tenemos. Es un proyecto que se difunde actualmente por redes, por internet y por Canal Once (de la televisión mexicana) Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI) y Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indí­genas (CDI) que son los principales patrocinadores del proyecto.

A la fecha lo que hemos hecho, es una recopilación de historias de tradición oral, dando lugar a estas otras historias y la riqueza que tienen los adultos mayores, los abuelos, para fomentar un lazo. Y en un siguiente paso, también (que lo hemos hecho gracias al INALI desde hace dos años), es hacer un trabajo más directo con las comunidades. No es un proyecto creado para la comunidad, sino con la comunidad.

Son cuentos, los últimos que hemos hecho, ya en un taller con los niños, para que los dibujos de los niños sean los mismos a los que demos animación, y ahí mismo, los adultos mayores sean los que nos digan qué historias vamos a retratar. Buscamos ser un detonante, una chispa que pueda generar nuevas acciones, dentro de las comunidades, dentro de las escuelas, con los jóvenes, es un proyecto sin fines de lucro, que está abierto totalmente en internet, en el sitio web 68voces.mx. Y por lo mismo también se pasa en televisión abierta, para que pueda llegar a todo el que tenga que llegar, y sobre eso se puedan generar nuevas acciones.

¿Cómo salen adelante, frente a la floclorización, y esa cultura de invisibilidad de la presencia indígena? Durante muchos años fuimos educados para entender que los pueblos indígenas eran culturas muertas, y no, son culturas vivas, actuantes, y que proponen, que tienen una presencia ¿Cómo salir adelante y romper con esta lógica que se creó con la colonización?

Creo que ha sido el trabajo ya de muchas personas, de muchas instituciones y de muchos esfuerzos, a lo largo de muchos años. El INALI lleva ya, si mal no recuerdo, unos 30 años operando, es un instituto en México, que es el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas, y hay muchos esfuerzos de distintas instituciones… Por un lado la colonización, y en México específicamente también con el Porfiriato, se designó que toda la comunidad debería ser homogenea, y se prohibía que se hablara en lenguas indígenas. Poco a poco ha ido variando esa conciencia, dándole lugar a todas las personas que hablan como lenguas diferentes, y también enfatizando que, al contrario, en lugar de ser algo malo, es algo enriquecedor. Toda la maravilla que es lo que representan todas estas lenguas, la lengua vista como la punta del iceberg, todo lo que está detrás de ella, cultura, tradiciones, historias, la comunidad que representa.

¿Cúal ha sido la estrategia para hacer accesible este proyecto a más jóvenes, e incluso por ejemplo a los 35 millones de mexicanos que vivimos en Estados Unidos? Tal vez incluso pensando en los millones de herederos culturales mexicanos que se quedaron de este lado, que no cruzaron la frontera, sino que la frontera los cruzó cuando Estados Unidos se quedó con la mitad de nuestro terrotorio. Esa es una raíz no muy explorada, ni muy atendida por el estado mexicano, ¿Cómo hacer accesible éste espacio hacia esta gente?

El proyecto, la verdad es que, en lo personal me ha ido sorprendiendo. El proyecto surgió hace 5 años, surgió por una necedidad personal de hacer algo para los demás a través de lo que sabes hacer, que es contar historias, y en específico también como en este tema de lenguas indígenas, mi abuelo tenía asendencia Maya, de Yucatán, el era de Maxcanú. Cuando lo creé fue como muy personal, y conforme ha ido evolucionando, conforme ha ido pasando el tiempo, fue una sorpresa para mí, ver el interés de ciertas instituciones para fomentarlo, lo cual ha sido un gran apoyo en difusión. En este caso el INALI, y Canal Once, y que también a través de las redes sociales se ha ido viralizando para llegar a muchísima gente, sobre todo también en Estados Unidos como dices. A mexicanos o a latinos que quedaron del otro lado, o que están del otro lado, y que he visto también que tienen esta necesidad de conectar, necesidad desde un punto regresar a su raíces, o enaltecerse cada vez más de lo que tienen. De hecho los que están fuera creo que son los que más valoran–de los comentarios que más nos han llegado–son de gente de fuera, que extraña o que se enaltece de ser parte de alguna de estas comunidades. Y creo que es mucho lo que pasa siempre, que cuando alguien ve perdido su espacio, en este caso su territorio, su familia, su cultura, la empieza a extrañar y creo que también por eso ha sido como un proyecto que se ha viralizado en esa comunidad.

¿Cómo desconstruir este proceso para entender y hacerle entender al país que somos diferentes, que así debe ser, que no tienen por qué uniformarnos, no tenemos todos por qué ser iguales, hablar igual y pensar igual?  

Justo creo que es un tema de sensibilización, de dar a conocer, por eso la premisa del proyecto: “Nadie puede amar lo que no conoce”. Por eso dar a conocer esta riqueza que existe, riqueza cultural, lingüística, en arte, en historia, y que a través de este conocimiento, podamos justo fomentar el orgullo. Creo que es poco a poco, como te decía, que son muchas las instancias y proyectos que poco a poco han ido sensibilizando, y no solo en el tema indígena, sino en el tema de ser parte de una comunidad indígena, en muchos temas. Justo creo que es un momento en el que se ha sensibilizado hacia la diversidad y parte de lo que buscamos en el proyecto es encontrar el amor y la riqueza en la diversidad.

 ¿Cómo has vivido tú, esta proyección del trabajo de 68 voces, en las comunidades indígenas? ¿Qué es lo que te dice la gente, pensando en cómo pueden construir estos procesos de resiliencia, de reempoderamiento en la comunidad? ¿Qué inspira el trabajo de ustedes?

Los comentarios que nos han hecho han sido muy lindos, la verdad, como hasta cierto punto de agradecimiento por visibilizarlos, como ser un granito de arena que los está visibilizando. No somos la panacea, no quien va a dar la solución, pero el punto es generar una conversación y que a partir de ahí se puedan generar otras cosas, y creo que eso sí se ha logrado por lo menos como proyecto, y que las mismas comunidades así lo han visto y lo han agradecido: el ayudar a visibilizar su cultura, su lengua, darle un lugar, darles una voz.

¿Qué es lo más creativamente desafiante y hermoso que te ha tocado vivir en éste proyecto?

No se si desafiante sea la palabra, pero lo más hermoso ha sido conocer, yo misma toda la variedad y toda la riqueza que existe. Creo que la mayoría de los que estamos aquí, la mayoría de los mexicanos, sabemos que hay una gran riqueza cultural, pero creo que es tanta que no la conocemos.

A mí me ha encantado, dentro de este proyecto, conocer las historias, conocer a la gente sobre todo, y de viva voz estarlos escuchando, y saber como todas estas historias son parte o las han construido las comunidades. Historias de por qué no tienen agua, historias de por qué sólo existe la palma en ese lugar, historias que los han hecho lo que son ahora y que como tal nos van construyendo como país. Como que en algún momento una reportera justo me preguntaba de cómo yo me catalogaba, como que ella lo mencionaba como que muchos se catalogan, “a pues, yo soy zapoteco” “soy maya” o “soy…” Pero para mí eso al mismo tiempo ya excluye de nuevo a los demás, y creo que lo importante y lo que yo también saco del proyecto, y lo que hacemos como proyecto, es que yo para mí soy mexicana y ser mexicana significa toda esta diversidad y eso es lo que nos hace increíbles como mexicanos.  

* Director creativo y cofundador de HOLA COMBO, productor centrado en el desarrollo de contenidos audiovisuales que creen en la responsabilidad social que tenemos, como medio de comunicación. Diseñadora de la Universidad Iberoamericana, tomó el diseño y la animación de Televisa como especialidad, donde fue parte del proyecto Imaginantes. Con más de 12 años de experiencia su trabajo ha sido reconocido en diversas publicaciones y festivales nacionales e internacionales, como el Festival de Nueva York, Promax-BDA, Ariel, Annecy entre otros, así como por el Fondo Nacional para la cultura y las artes, donde gracias a la beca coinversiones, creó la serie 68 Voices-68 Hearts.