Greta Thunberg y los Guardianes del Bosque, @GuardianesBos
Mientras este viernes 20 de septiembre, millones de niños, jóvenes y sus padres o mentores toman valientemente las calles de todo el mundo (¡en 150 países!) para luchar por el clima; en Awasqa sabemos que, por lo general, los que están en mayor riesgo son quienes a menudo se colocan en la línea de fuego para presionar por el cambio. En este caso, son los jóvenes que no quieren perder la esperanza, quienes ven a familias enteras desplazadas a su alrededor y que demandan que la acción no puede esperar.
Para los pueblos indígenas, sus demandas de cambio comenzaron hace cientos de años, ya que lucharon, suplicaron y perdieron vidas para mantener a raya el desarrollo devastador: un modelo que en ese entonces se impuso como «civilización» y hoy como «crecimiento económico». Pero, los pueblos indígenas siguen ahí, donde han estado siempre. Aunque hoy representan apenas el 8% de la población global, protegen el 80% de la biodiversidad del planeta según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. Para ellos no hay otro método de sobrevivencia que defender el agua, la tierra y el territorio. El nivel de agresiones, acoso, desalojos, despojo y asesinatos que sufren los ambientalistas que defienden las comunidades indígenas es con mucho, superior a la incidencia de represión que sufre en general todo el movimiento social que lucha por sus derechos. Hoy, defender a la Pachamama se ha convertido en una actividad de alto riesgo. Así lo documentan profusamente Vicky Tauli-Corpuz, quién es la Relatora Especial de Naciones Unidas sobre Derechos de los Pueblos Indígenas. Los procesos de criminalización de la protesta social emprendidos por los estados nacionales, han disminuído críticamente la base de derechos humanos, bajo el pretexto del impulso al desarrollo y la idea occidental de progreso.VER INFORME DE LA ONU: “Deberían haberlo sabido mejor”: los gobiernos y las corporaciones de todo el mundo están haciendo cada vez más difícil, y mortal, que los pueblos indígenas y las comunidades locales protejan las tierras y los bosques. Relator especial de la ONU sobre los derechos de los pueblos indígenas. https://www.theyshouldhaveknownbetter.com/Para citar el informe de la ONU: “Según Front Line Defenders, el 67 por ciento de los 312 defensores de derechos humanos asesinados en 2017 defendían sus tierras, el medio ambiente o los derechos indígenas, casi siempre en el contexto de proyectos del sector privado. Alrededor del 80 por ciento de los asesinatos tuvieron lugar en solo cuatro países: Brasil, Colombia, México y Filipinas». En Abya Yala o en las Américas, varias naciones indígenas se han embarcado en un camino de reclamos legales, locales, nacionales e internacionales sobre su derecho a defender el agua, la tierra y el territorio. La persistencia de los resilientes pueblos indígenas de Colombia, quienes han resistido no sólo los más de 500 años de colonización, sino además los más de 60 años de guerra interna, y ahora luchan por la reconstrucción histórica de la resistencia de los pueblos, porque saben que la memoria es el refugio donde yace la esperanza del pueblo. En medio de una nueva oleada de asesinatos contra dirigentes y comuneros.
COLOMBIA. VER EL REPORTE DE LA ONIC: “Tiempos de vida y muerte”: Memorias y Luchas de los Pueblos Indígenas de Colombia, Organización Nacional Indígena de Colombia, http://memoria.onic.org.co/
MÉXICO. VER EL REPORTE: DERECHO DE RÉPLICA, HABLAN LOS PUEBLOS https://hablanlospueblos.org/O en Brasil, la punta del iceberg de la crisis climática, en dónde en los dos años recientes se han incrementado exponencialmente los asesinatos, el acoso, los hostigamientos. Acompañados del asentamiento de mafias deforestadoras de madereros, ganaderos y extractivistas, apoyados por el actual gobierno. En éste país, que es el guardián de los pulmones de la Pachamama, durante el mes de Agosto pasado, se vivió un nivel de depredación, incendios intencionales y deforestación superior al sucedido en los últimos 10 años recientes. Los regimientos indígenas de policías comunitarias, Guardianes del Bosque, son insuficientes y se encuentran frecuentemente amenazados por quienes depredan la Amazonía.
BRASIL, VER INFORME DE HRW: «Brasil: Redes criminales contra defensores de la selva tropical» por Human Rights Watch, https://www.hrw.org/news/2019/09/17/brazil-criminal-networks-target-rainforest-defenders